Reflexiones granadinistas de mi historia rojiblanca

OPINIÓN GP | CRISTINA AYBAR @cristinaaybar10 | LA ILUSIÓN DEL SUR

Esto no es una opinión acerca del partido dominical ni nada por el estilo.

Una vez dije que todos teníamos nuestra historia particular con el Granada CF y creo que ahora es el momento indicado para recordarla. Cada uno la suya. Ver cuándo empezaste a seguir a este equipo, por qué, qué fue lo que te enamoró de este club, de estos colores…

Y sobre todo ver por cuántas cosas has pasado a su lado. Cuántas experiencias has tenido la suerte de vivir con él. Cuántas lágrimas se te han escapado en ciertos momentos. Cuántas sonrisas te ha sacado. Cuántas noches de nervios, de indignación, de euforia, de bajones, de subidas… Porque otra cosa no, pero vivir has tenido que vivir momentos buenos y menos buenos; porque esa es la esencia de este Granada CF y pasen los años que pasen no se nos puede olvidar de dónde venimos, por dónde hemos pasado, dónde hemos estado y así, solo así, podemos comparar y observar el mérito que tiene estar a día de hoy donde estamos.

Personalmente, mi historia no tiene nada que ver con la de nadie, supongo. La historia de cada persona será totalmente diferente a la de los demás, aunque se asemeje mucho, ninguna historia es la misma. Es muy difícil que todos sintamos a este equipo de la misma forma. Y no digo que haya quien lo sienta más o lo sienta menos, porque ese debate me parece absurdo; sino que cada uno lo sentimos a nuestra manera. Para cada persona significa algo diferente y a la vez igual el entrar cada domingo a nuestro estadio, a Los Cármenes.

Mi historia en particular empezó hace más de diez años. Sinceramente, ni me acuerdo bien. Este año cumpliré 22 años y puedo decir que he vivido como granadinista tres ascensos (más la posibilidad del de este año) y un descenso, por ahora.

Os mentiría si os digo que me acuerdo del partido del ascenso contra el Guadalajara. Tendría por aquel entonces 8-9 años. Sé que mi padre en aquellos tiempos sí era abonado, pero supongo que no me llevaría a aquel partido. Eso sí, tengo CDs con la eliminatoria al completo y la correspondiente celebración.

A mí me encantaba el fútbol, algo que a la mayoría de la gente le llamaba la atención al ser una niña. El primer equipo que me gustó fue el Real Madrid. Parte de mi familia y en especial un primo era del Real Madrid. Me gustaba ver los partidos con él y de ahí empecé a interesarme cada vez más por este deporte.

Supongo que por eso mi padre decidió llevarme al estadio con él. Por aquel entonces, los niños todavía no pagaban y yo me sentaba con él. La sensación de ir a un estadio de fútbol para cualquier niño es impresionante cuanto menos, y para mí no iba a ser menos. Me acuerdo que él tenía su abono en preferencia, prácticamente en el centro del campo. Y a partir de ahí el equipo se encargó de ir enamorándome año tras año.

Y así empezaron a pasar los años, a vivir momentos, mi primera camiseta, mi primer jugador favorito… etc.

Pero llegó el día en el que mi padre decidió no renovar más su abono y yo claro, todavía era pequeña y obviamente no me dejaban ir sola.

Por aquel entonces, al no poder ir ya todos los domingos al campo, me tocaba seguir al equipo de la forma que podía, a veces por radio, otras por televisión… según la categoría, claro está. Hasta que llegó el ascenso a 2B.

Y de ahí a Segunda. La cosa se iba poniendo cada vez más seria.

Recuerdo el momento en que se decidieron los play-off y al Granada CF le tocó el Celta. Mi padre me dio a elegir entre ir al estadio para ese partido o ir en el caso de que el Granada CF llegara a la final. Como siempre, yo creí en el Granada CF y decidí que prefería ir a la final, aún sin haberse jugado ningún partido contra el Celta. Cuando ganamos la eliminatoria yo ni me lo podía creer. Estábamos en la final del play-off para el ascenso a Primera División.

Pero cuando mi padre fue a sacarme la entrada para el partido contra el Elche, era tan larga la cola que las entradas se agotaron antes de llegar su turno y no pude ver tampoco ese partido en el campo.

Pero el equipo lo consiguió y subimos a Primera División.

Luego llegaron los años en primera hasta que el equipo volvió a descender.

Y por fin, llegó este año. Mi primer año de abonada, y sí, como ya dije una vez, voy sola. Y la verdad que no me hace falta nadie. Se vive el fútbol de una manera totalmente diferente y no sabría decir si es incluso mejor que ir acompañada.

Después de todo lo que he pasado al lado de este equipo, creedme cuando os digo que ser socia e ir cada domingo a ver a mi equipo al estadio ya de por sí es un sueño, pues imaginaos lo que es que este equipo haya hecho una temporada tan perfecta en «mi primer año».

Hay quien me ha dicho alguna vez que lo vivo todo con demasiada positividad y que lo veo todo demasiado perfecto. Pero es que habiendo visto todo por lo que hemos pasado tantos años atrás y reconociendo ahora el mérito de todos y cada uno de los componentes del club en este año como para no ser positiva y como para no estar contenta.

Esa es mi historia con el Granada CF. O un resumen muy resumido, mejor dicho. Porque es imposible que pueda explicar todo lo que he sentido durante tantos años al lado de este equipo. Quizás para vosotros no tenga nada de especial, pero para mí, os puedo asegurar que es la historia más especial del mundo. Porque cada uno sabe lo que ha vivido y lo que ha sentido gracias al Granada CF. A algunos les habrá costado menos estar ahí y a otros nos ha costado más.

Os animo a que cada uno recuerde su propia historia. A que hagas memoria y recuerdes todos los momentos buenos y también los malos para valorar lo que este equipo está consiguiendo este año. Porque me atrevo a decir que es una de las plantillas de las que más podemos estar orgullosos después de tantos años de historia como tiene este club.

Nos han hecho disfrutar, nos han hecho reír, nos han unido como hacía años que no lo estábamos, nos han hecho soñar, nos han hecho ver fútbol de verdad, nos han demostrado que son profesionales, nos han demostrado que sienten el escudo y que quieren cumplir el sueño de todos y cada uno de los granadinistas.

Estamos a un pasito de llegar a la gloria. Juntos hemos llegado muy lejos ya.

Por todo eso y por todo lo que queda por venir, GRACIAS.