Magistral

OPINIÓN GP | RAÚL ZAMBRANO @RauLiLloZQ | DESDE PREFERENCIA

Tras golear en Albania, y plantarse en la siguiente ronda clasificatoria de Europa League, el Granada recibía en Los Cármenes al Alavés. El cuadro babazorro llegaba tras perder en la primera jornada, con un entrenador nuevo y con ganas de plantar cara al Granada. Aunque a los siete minutos y tras un inicio fulgurante, Machis manda una pelota para que la luche y la gane por velocidad Soldado, batiendo por bajo al portero Pacheco.

Una de las claves de un equipo reside en el centro del campo. El Granada este año ofrece un abanico amplio de opciones, trivote, doble pivote, mediocentro y dos interiores … Milla parece haber realizado un máster con Diego Martínez en la medular, mostrando jerarquía y desparpajo, asumiendo liderazgo y responsabilidad. Unido a un gran Gonalons, el galo disputó, quizás, el mejor partido desde que está en el cuadro rojiblanco. Salida elegante, mostrando templanza, seguridad y sin complicarse la vida. El otro integrante del centro del campo fue Yangel quien ocupó una posición más adelantada en el terreno de juego.

En la defensa, debutó de titular Vallejo. El aragonés se le nota falto de ritmo, aunque a medida que avanzaba el choque comenzó a mostrarse más confiado y compenetrado con Domingos Duarte. Tras una falta en la frontal, Joselu logró empatar el partido. El estado físico del Granada fue bajando, se notaba el viaje a Albania y el desgaste, aún así y tras un balón de Montoro a Machis, en segunda instancia, anotaba el definitivo 2-1.

Liderazgo anecdótico, sin embargo, el Granada mantiene sus señas de identidad, trabajo duro, juego directo e implicación de cada uno de los jugadores que participan en el partido. El jueves, Los Cármenes se viste de gala para recibir su primer partido de competición continental. El rival el equipo georgiano del Lokomotiv Tbilisi.

Por lo pronto, las gradas estarán vacías y esa es la peor de las noticias.