El cristal con el que se mira al atletismo
OPINIÓN GP | JOSÉ LUIS CUENCA @piratacuenca | COLUMNA PIRATA
Ha finalizado el Campeonato Mundial de Atletismo de Doha 2019. Probablemente, el mejor en lo que a espectáculo y marcas se refiere.
La actuación española nos deja con sentimientos encontrados, más aun si analizamos el tratamiento que esta ha tenido en RTVE, nuestra televisión pública nacional y única empresa con derechos para televisar la competición en España, pues en esta ocasión, Eurosport no compartía privilegios con el ente televisivo más antiguo de nuestro país.
Al grano. La verdad es que no comprendo por qué los comentaristas tratan cada actuación de los españoles como un éxito, cuando ellos mismos, los deportistas, en las entrevistas, comentan que no lo han hecho bien. Yo soy atleta y entrenador, y comprendo al deportista, pero es que creo que no hace falta ser ni atleta ni entrenador para comprenderlo cuando el participante muestra su disconformidad para con su propio resultado en la pantalla de Teledeporte.
Como deportista lo que quieres es alguien que te diga dónde has fallado y por qué, para así poder ponerle solución. El atleta sabe que no ha rendido como esperaba y normalmente no está contento, sabe que estuvo por debajo de lo que deseaba y es crítico con su actuación cuando llega a los micrófonos de Tve. Aun así, los comentaristas tratan de transmitir que todo ha sido un éxito y que todo va bien.
No entiendo por qué tanto peloteo. Desde luego yo, cómo deportista, cuando lo he hecho mal (que han sido muchas veces) lo que menos necesito es que me doren la píldora. Para decirme qué bueno soy ya está mi madre.
Se está extendiendo la falsa creencia de que si dices públicamente que un deportista no ha estado bien, le estás faltando al respeto y creo que esto se encuentra más extendido en atletismo que en otros deportes.
En fútbol o básquet si fulanito falla individualmente o tal equipo compite por debajo de su nivel, la prensa y los aficionados lo dicen con mucho menos reparo. Por supuesto que hay gente que en lugar de dialogar, espeta. Existen en todos los ámbitos de la vida, pero las críticas constructivas pueden y deben ser transmitidas con respeto.
Muchos comparten esta opinión dentro del mundo del atletismo. El problema es que no lo comentan públicamente porque el mundo del atletismo es pequeño, todo el mundo se conoce y teme ser señalado.
Esto me hace enlazar con un tweet publicado por mi colega Cristian Guerrero (cubrió como periodista los JJOO de Sochi 2014) en la noche de la jornada de clausura de Doha 2019: “Ellos han montado el producto en torno a alabar y promocionar a sus conocidos dentro de ese deporte. Como si el objetivo fuese atraer solo a ese público y no vender un producto de calidad global”.
Entre el lavado de cara a la actuación deportiva y el compadreo de los comentarios, el atletismo solo lo ve el que está dentro del mundillo, el que es atleta, entrenador o familiar.
Quien esté en su casa y no sea un “participante” de este deporte se encuentra una retransmisión en la que algunos comentaristas dejan claro constantemente que son amigos de todos los atletas y entrenadores. Al de fuera le cuesta identificarse con esto, no nos engañemos. Es difícil que se apasione por este deporte alguien que no sea practicante o familiar de practicante.
En otros deportes como basket o ciclismo, uno puede sentirse identificado con Purito Rodríguez, con Ivan García Cortina o hasta con Walter Berry, aunque no lo conozca personalmente de nada. Esto en atletismo es difícil que ocurra.
Es peligroso que el periodista o comentarista, ejerza su cometido condicionado, a toda costa, por no deteriorar una amistad con el deportista que está en televisión, en lugar de ejercer su labor y contar exactamente lo que pasa. No vaya a ser que mi amigo (o alguien superior) se enfade y…
Como si uno no pudiera decirle a su amigo: “tío, te has equivocado aquí, es duro, pero si remas en el sentido adecuado, la próxima vez puedes hacerlo mejor”.
España ha quedado 31ª en el medallero y 24ª en la tabla de puntos. Hay atletas españoles que han estado bien, metiéndose en finales y consiguiendo una posición mejor de la esperada, es innegable. Pero este no es el paso que esperamos, no nos engañemos. Los Campeonatos de Europa no son la tabla de medición correcta del nivel de un país en atletismo. Este nivel se aprecia en un Campeonato Mundial al aire libre o en unos JJOO, yo diría que ni el Mundial de pista cubierta es válido para sacar el nivel teórico de un país. Solo hemos obtenido una presea y, digámoslo que no pasa nada (y no le estamos faltando el respeto a nadie) es una medalla que no ha sido formada por la cantera del atletismo español, sino por la del cubano.
Si continuamos con el paternalismo y el lavado de cara, y todo el que venga de fuera se encuentra con que somos una familia en la que todos nos conocemos pero, al mismo tiempo, en la que cuesta entrar o identificarse, costará avanzar, porque somos muy pocos.
Todo depende del cristal con el que se mira. Las críticas, constructivas y desde el respeto, pueden y deben ser necesarias para progresar.