El Coviran Granada le dice hasta pronto a la ACB
Los rojinegros perdieron ante Andorra en el último partido de la temporada 24-25 disputado en el Palacio de Deportes
REDACCIÓN DEPORTE GRANADA (POLIDEPORTIVA) / Felipe Bazán
La despedida a una competición como la ACB no debe borrarnos la sonrisa baloncestística. Hoy viernes 30 de mayo, a una hora incompatible con la jornada laboral, tenemos la oportunidad de ofrecer un hasta luego a la máxima categoría en nuestra ciudad. El Coviran Granada recibe a Morabanc Andorra en su templo del Palacio de Deportes.
El recorrido de los rojinegros, presididos por Óscar Fernández-Arenas y dirigidos por Pablo Pin, en su ‘corta’ existencia como club nos ha tenido que llenar el sentimiento, el orgullo, la identificación y los depósitos de la batería individual (colectiva) repleta. Además del corazón nazarí que ahora dejará paso al análisis para diseñar un nuevo proyecto deportivo.
El salto inicial con la posesión para los locales y Agus Ubal no acierta con la penetración. El primer lanzamiento andorrano tampoco es convertido por Ferrán Bassas desde más allá del 6.75. El rebote ofensivo y el base Shannon Evans demuestra su muñeca en el triple (0-3). El Coviran con la baja de Amine Noua en este envite no tenía un estilete en este arranque. Los errores de Ousmane Ndiaye y Elías Valtonen lo ponían de manifiesto. El Moranbanc realizaba su trabajo y aprovechaba dos faltas personales consecutivas del uruguayo Ubal, una de ellas antideportiva para irse hasta el 0-9, a falta de 8:40.
El casillero anfitrión movía dígitos con dos tiros libres anotados por Iván Aurrecoechea con 7:59 por jugar. La diferencia aumentaba de nuevo de la mano de Evans desde el 6.75. El equipo granadino se empecinaba con el triple con total desacierto. Los andorranos dominaban el rebote en ataque y hasta cuatro posibilidades al aro consecutivas tuvieron, eso sí, con error. A unos pasos señalados a Rubén Guerrero, le siguió la canasta de Kyle Kuric para el 2-14. El tiempo muerto de Pin con 5:46 por delante.
El Coviran Granada por medio de un Rubén Guerrero muy activo, hacía su primera canasta en juego a falta de 5:25 minutos. A partir de aquí, los visitantes mantenían a raya a su oponente. El técnico granadino había ampliado la rotación de jugadores en este primer cuarto y hasta once jugadores tuvieron minutos. El Morabanc sustentado por Kuric, Evans y la aportación colectiva dejaban la diferencia en doce puntos (18-30).
El segundo cuarto se desarrolló algo más equilibrado en cuanto anotación. Los rojinegros ajustaban su defensa siendo más intensos, aunque se mostraban poco precisos de cara al aro. Scott Bamforth, con un triple, abría la ventana pero cuatro puntos seguidos de Ben Lammers estiraban aún más la renta (21-36). El Coviran Granada quería reaccionar con un 2+1 del francés Jonathan Rousselle y a continuación Elías Valtonen desde el 6.75 llamaban a la esperanza. La plantilla de Joan Plaza encontraba rendijas para penetrar o anotar desde fuera. Al descanso se llegó con quince de desventaja 34-49.
El paso por vestuarios en el Palacio
El panorama iba a mejorar en este tercer cuarto. El internacional Rubén Guerrero se mostraba en la pintura y Pere Tomàs anotaba desde el exterior. En los andorranos aportaban Sekou Doumbouya, Shannon Evans, Stan Okoye, el ex-blaugrana Kuric y el ‘center’ Felipe Dos Anjos. El Coviran Granada apoyado con dos bases en juego muchos minutos (Sergi García y un anotador Rousselle) eran más incisivos y se encontraban en la defensa de ayudas y cambios constantes.
El finlandés Valtonen convertía un 2+1, Guerrero se fajaba en la pintura con solvencia y Jonathan Rousselle se echaba al equipo sobre las espaldas. El ‘playmaker’ local era muy pícaro en un saque de fondo rival y modulaba su muñeca desde la línea de 6.75 con sendos aciertos consecutivos. A tan sólo tres puntos de diferencia se colocaba Coviran (55-58), a falta de 3:42. El Morabanc Andorra parecía desarbolado y ni siquiera un tiempo muerto de su entrenador les hacía carburar. Un triple de Okoye y tres tiros libres anotados por Valtonen a falta de 0.2 décimas de segundo.
A los últimos diez minutos de juego, se iba a entrar con un esperanzador 62-66. Los compases iniciales del cuarto parcial demostraban nervios y precipitación en ambos bandos. Nadie conseguía anotar. Evans erraba un triple, Riccardo Visconti (hoy más opaco) fallaba el suyo y cerraba el circulo de fallos Ferrán Bassas, también desde el 6.75. A falta de 8:38, Iván Aurrecoechea rompía este maleficio y colocaba a los suyos con 64-66. Los árbitros señalaron un falta en ataque del visitante Nikos Chougkaz.
El Coviran tuvo opción de ponerse por delante, por primera vez en el partido, pero el triple de Visconti no entró y en la transición, una bandeja de Bassas establecía el 64-68. Para rematar, Aurre iba a la línea de 4.60 y no convertía ninguno de los dos tiros libres. En la jugada posterior, una acción de Chumi Ortega para sacar canasta y falta para un 2+1.
El mallorquín Sergi García sustentaba a los granadinos con un triple. Los anfitriones se agarraban a su defensa, aunque en el otro lado del campo no se mostraban fluidos, además, algo obcecados con intentar anotar constantemente de tres. Los errores de Ubal y Visconti, si eran aprovechados por Doumbouye primero desde debajo del aro y después con una penetración con fuerza para el 67-75. El técnico granadino Pablo Pin detuvo el choque con 6:10 por delante.
Daba la impresión que no era el día oportuno para ganar e incluso Agus Ubal erraba uno de sus tiros libres (hasta siete falló el equipo con el 14/21 total). Al contrario que Shannon Evans que sacaba faltas de tiro e iba al 4.60 muy solvente. Las precipitaciones regresaban en ambos bandos. El senegalés Ousmane Ndiaye tuvo una pérdida no forzada y se sucedieron los errores en el tiro mientras el reloj avanzaba. Un palmeo de Andorra cortaba la sequía y llevaba su ventaja de nuevo por encima de la decena (68-79). Otra vez Pin Tamayo intentaba corregir aspectos desde el corrillo del banquillo con TM a falta de 3:42.
Ni la penetración de Rousselle ni la ‘metralleta’ de Bamforth pudieron acercar a Coviran. Con un triple a tabla de Shannon Evans 74-87, se entraba en el último minuto y era momento de cambios con ovaciones de un público arropando a sus jugadores. A falta de 51.2 segundos Rousselle se llevaba los aplausos atronadores del respetable al ser sustituido. A la misma vez se iba Valtonen y algo más tarde el capitán Pere Tomàs.
Hasta el canterano Osi Cerdá iba a tener su oportunidad de debutar en la máxima categoría e intentar anotar en los últimos segundos aunque sin éxito. El claxon del Palacio de Deportes sonaría, con la victoria de Morabanc Andorra por 77-89.
El Coviran Granada se despide de la ACB, diciéndole un ‘hasta luego’ a la competición. La comunión entre plantilla, peñas y aficionados se hizo patente una vez más. Ahora será el momento de la reflexión y volver a configurar un proyecto que les acerque al retorno. La ciudad granadina ha disfrutado de tres temporadas en la élite, con una entidad jovial como es la Fundación CBG, bajo la dirección de Óscar y Pablo. El curso 24-25 echa la persiana, el pensamiento ya debe estar en la siguiente temporada.
¡¡¡Que bonito es cuando salgo de casa para ir al Veleta (Palacio)!!!
FICHA TÉCNICA
Coviran Granada: Jonathan Rousselle (19), Elias Valtonen (11), Agustín Ubal (2), Iván Aurrecoechea (6) y Ousmane Ndiaye (0) – quinteto titular – Scott Bamforth (12), Gio Bezhanishvili (0), Sergi García (8), Pere Tomàs (3), Rubén Guerrero (12), Riccardo Visconti (4) y Osi Cerdá (0).
MoraBanc Andorra: Shannon Evans (16), Chumi Ortega (3), Ferrán Bassas (5), Ben Lammers (8) y Sekou Doumbouya (12) – Aaron Ganal (0), Goudou-Sinha (2), Rafa Luz (2), Stan Okoye (9), Kyle Kuric (11), Felipe dos Anjos (10) y Nikos Chougkaz (9).
Parciales: 18-30, 16-19, 28-17 y 15-23.
Árbitros: Emilio Pérez Pizarro, Francisco José Araña y Alberto Baena.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la trigésimo cuarta jornada de competición en la ACB (Liga Endesa), disputado en el Palacio Municipal de Deportes de Granada ante 4189 espectadores (cifra oficial facilitada por la entidad rojinegra), En la grada, la presencia del brasileño Cristiano Felicio, exjugador del Coviran Granada.
