Piqué 1 Rajoy 0
OPINIÓN GP | FRANCISCO GONZÁLEZ GARCÍA | DESDE EL FONDO DE LA CÁRCEL
En el monumental embrollo que supone el desafío de Cataluña, o más bien el desafío de los políticos catalanes empeñados en separarse de España, resulta llamativo el papel que juega la cuestión en el deporte del balón.
En mi infancia yo era admirador y seguidor del Bilbao, por aquello que solo jugaban los de la tierra. Iribar era mi ídolo. Tengo una fotografía a su lado en el viejo Los Cármenes, allá estaba yo con mi melena juvenil al lado del “Chopo”. Cuando me enteré de que no llegó a jugar su partido 50 con la selección, un número inaudito para su época, por razones digamos que no precisamente deportivas, entonces comprendí que el fútbol no era solo fútbol, en ocasiones.
Valga esta introducción personal para comentar lo del 1-O, eso que parece un resultado de fútbol, es decir un uno a cero pero que ha designado lo del primero de octubre, el dichoso referéndum ilegal de Cataluña. Y en todo ello que si el club que se denomina “más que un club” iba a jugar o no, si se va de la liga española o no y todo lo demás, incluido el papel de los jugadores del Barcelona en la selección española.
Hace años que el Barcelona, gracias a una gran política de cantera y al contar con un jugador genial como Leo Messi, ya no necesita usar una línea de lloros y quebrantos que era tradicional en otras décadas; era aquello de que los árbitros nos roban y solo favorecen al Madrid. Su superioridad deportiva era tan evidente que aquello pasó a la historia. Lo de Madrid nos roba ha pasado, por desgracia, a la política.
Empero si en lo deportivo el FC Barcelona es un gran club, en su gestión directiva, creo que yerra totalmente. Alinearse con el independentismo es despreciar a una buena parte de su afición en la misma Cataluña y por supuesto en el resto de España y en el mundo. Pero es una opción, por supuesto.
Y en esto llegamos a lo de Piqué. ¿A qué juega Piqué cuando dice que por qué no va poder jugar un independentista en la selección, aunque no sea su caso o a lo mismo sí que lo sea?
Digamos que juega al chico guapo, buen jugador, con multitud de seguidores en redes, casado con famosa, con millones, con labia, desparpajo y que no se esconde. Difícil discernir qué dice por decir, qué siente, qué le importa y qué más le da mucho o poco. Y que todo esto es un juego, vamos que le da igual.
Comparen con la otra parte del resultado en el titular de este “desde el fondo de la cárcel” y verán que no hay color. Aunque, por supuesto, esto no es sólo un partido de fútbol, sino algo mucho más serio. Y ciertamente que algunos ya tendrían que estar precisamente, allí, en la cárcel, pero Rajoy sigue sin acertar con la portería contraria.
Lo del chopo si hubiera jugado en esta época tan mediática y con tantos dineros que se manejan no sabemos qué hubiera hecho todo esto se va de madre ya los valores que antes había no son los mismos todo es vanal y ya nadie es lo que parece estamos ha merced de las redes y el dinero